¿Qué es la conservación y restauración de monumentos?
Autor: Betzaida Indriago
Ésta es una disciplina que se aplica en monumentos con carácter cultural o histórico, y que, muchas veces, son denominados patrimonios, bien sean locales, regionales, nacionales o a nivel mundial, y consiste en realizar procedimientos tales como la sustitución de elementos deteriorados por nuevos, manteniendo su apariencia original, para luego ser mantenidos y transmitidos a las presentes y futuras generaciones.
La restauración y conservación son procesos importantes y necesarios, ya que preservan y garantizan la permanencia de los monumentos, evitando el deterioro.
El Deterioro en los Monumentos
Deterioro se define como el daño o avería del estado, calidad, valor, etc., de una cosa. En el caso de los monumentos, el deterioro se produce debido a un conjunto de procesos que son accionados por agentes meteorológicos y antropogénicos. Éstos aplican un gran cambio en la apariencia, la forma, y además, en la estabilidad mecánica de un elemento arquitectónico.
Causas y Agentes en el deterioro de los Monumentos
Estas causas pueden ser de dos tipos, ya que los elementos pueden llegar a deteriorarse externa e internamente.
Entre las principales causas del deterioro externo están:
- El agua. La acción del agua origina procesos físicos y químicos en los monumentos (disolución e hidrólisis de minerales). Esta acción puede verse estimulada por factores climáticos y de composición del aire.
- La atmósfera. Los variados componentes atmosféricos actúan directamente sobre los minerales, siendo los principales contaminantes los óxidos de nitrógeno, carbono y azufre (provenientes de la combustión de hidrocarburos), el gas metano (este gas es emitido por fertilizantes y al quemar bosques), y los gases de combustión (tales gases son liberados al incinerar residuos sólidos).
- Los organismos vivos. Su acción sobre los monumentos es variada, va desde fenómenos físicos (como la acción de las raíces de arboles y plantas), a los efectos químicos o físico-químicos (producidos por excremento de aves, líquenes o bacterias).
- Los efectos antropogénicos. Los factores relacionados con la acción del hombre se pueden producir previamente a la instalación del material, o durante la misma. También se debe incluir el tráfico, ya que éste favorece la presencia de contaminantes en la atmósfera resultando agresivo en el ámbito urbano. Así mismo, el tráfico pesado da como resultado vibraciones que podrían llegar a afectar la estabilidad de las construcciones que estén próximas.
- Otros. También pueden citarse el viento y las temperaturas (en sus variaciones extremas), como agentes externos, pero de menor importancia.
Técnicas para su conservación y acciones preventivas
Para la conservación preventiva de los monumentos se pueden usar técnicas, consistidas en realizar políticas y acciones, y que ésta tengan a su vez como objetivo evadir y prevenir futuros daños.
Estas acciones deben ser efectuadas tomando en cuenta los siguientes aspectos:
- Realizarla sobre el contexto o el área circundante del bien, sin importar su tiempo, naturaleza, estado o condición.
- Deben ser indirectas, es decir, no debe interferir con los materiales y las estructuras de los elementos.
- No deben modificar su apariencia original.
Por otro lado, la conservación preventiva es considerada como "un sistema de mayor eficacia para promover la preservación a largo plazo de los bienes culturales".
Las técnicas más utilizadas son:
- Control de la humedad.
- Control de la temperatura.
- Registro.
- Embalaje.
- Planes de manejo y riesgo.
Químicos para la conservación
Son diversas las disciplinas científicas que hoy aportan sus metodologías para la investigación de restos arqueológicos con el objetivo de interpretar o proteger obras arquitectónicas que provienen de civilizaciones pasadas. en esta labor, la química juega un papel importante, ya que conoce las propiedades de los materiales de construcción utilizados en edificaciones antiguas, e idean fórmulas adecuadas para garantizar su cuidado.
La química, también se ha vuelto una base fundamental para llevar a cabo el proceso de restauración y conservación, como por ejemplo: El grupo Química Inorgánica de la Universidad de Córdoba, desarrolló (30 de junio del 2015) un nuevo material de restauración que permite disminuir el coste económico a la hora de la recuperación de monumentos. Hoy en día existen productos químicos modernos para la conservación que se han vuelto imprescindibles, tales como los disolventes, las resinas, los fungicidas, las siliconas, entre otros.
DESARROLLAN MATERIALES DE RESTAURACIÓN QUE CONSERVAN LIMPIAS LAS FACHADAS DE EDIFICIOS PATRIMONIALES
Materiales orgánicos e inorgánicos
Los materiales orgánicos se consideran así ya que contienen células de vegetales o animales, y pueden, generalmente, disolverse en líquidos orgánicos (alcohol, tetracloruros, etc.), pero no en el agua, y tampoco soportan altas temperaturas.
Algunos materiales orgánicos son:
- El plástico
- Productos provenientes del petróleo
- La madera
- El papel
- Pieles y lanas
Los materiales inorgánicos, a diferencia de los orgánicos, no proceden de células animales o vegetales, o relacionadas con el carbón. Éstos si pueden disolverse en agua, y resisten el calor mejor que las sustancias orgánicas.
Entre los materiales inorgánicos se encuentran:
- Los minerales
- El cemento
- La cerámica
- El vidrio
- El grafito
La UNESCO
La historia de la UNESCO se remonta a 1942, cuando en plena Segunda Guerra Mundial, los países del bloque aliado se plantearon cómo le harían para restablecer el sistema educativo en sus naciones cuando el conflicto bélico concluyera. El 16 de noviembre de 1945 -semanas después de concluida la guerra-, durante una conferencia de la recién conformada ONU, treinta y siete países de los cuarenta y cuatro que se encontraban reunidos fundaron la UNESCO. Pasó un año y el 4 de noviembre de 1946, se firmó la Constitución de la UNESCO, siendo ratificada por 20 países. Actualmente está integrada por más de 190 naciones y su sede principal está ubicada en París.
Uno de los objetivos de esta organización es "Proteger el patrimonio y apoyar la diversidad cultural, propiciando un entendimiento intercultural". Por esa razón crearon el concepto “Patrimonio Mundial”, con el que se resguardan los lugares de valor excepcional del planeta.
El ICOMOS
El Consejo Internacional de Monumentos y Sitios, también conocido como ICOMOS es una asociación civil no gubernamental, y está ubicada en alpajés, en Aranjuez ligada a la ONU, a través de la Unesco. Éste se encarga de aconsejar a la UNESCO y al Comité de Patrimonio a la hora de incluir un Bien cultural en la lista de Patrimonio Mundial.
Se creó a partir de una convención. En 1965 los países integrantes de la UNESCO se reunieron en Varsovia para elaborar la Carta Internacional sobre la Conservación y Restauración de los Monumentos y Sitios Histórico-Artísticos. Como el nombre es muy largo, esta convención se conoce como “Carta de Venecia”. Esta Carta de Venecia forma parte de los documentos de la UNESCO que se elaboran durante sus convenciones que realiza de vez en cuando. Estas convenciones promueven prácticas, tratados, acuerdos transnacionales de carácter legal en defensa de la conservación del Patrimonio. Así mismo, en la Carta de Venecia se estableció la creación de un Consejo Internacional de Monumentos y Sitios para su defensa y conservación.
Otras definiciones
Bienes muebles
Son todos aquellos bienes que pueden ser trasladados de un lugar a otro sin afectar su condición o naturaleza, como por ejemplo: joyas, vehículos, obras de arte, entre otros.
Bienes inmuebles
A diferencia de los muebles, los inmuebles no pueden ser trasladados. Se consideran como bienes raíces, por estar unidos de modo inseparable, física o jurídicamente al suelo. Son bienes inmuebles las parcelas, urbanizadas o no, viviendas, fincas, edificios, minas, entre otros.
Pre-inventario e Inventario
El pre-inventario decide la inclusión o exclusión y es necesario replantearlo para que incorpore un mayor nivel de información, útil a los especialistas y responsables de la gestión del patrimonio cultural. Así, se desarrolla una ficha de registro de pre-inventario que amplía la información contando, de este modo, con más elementos para efectuar la evaluación que decida la inclusión o no del caso en la etapa de inventario.
Mientras que el inventario, está dirigido al conocimiento de todos aquellos bienes legados por nuestros antepasados. En tal sentido, el qué inventariar estará sujeto a todo aquello que por referencia oral u escrita presente una característica o importancia particular para la comunidad en la cual se encuentra. La información que se obtenga del inventario será para el conocimiento de la colectividad sobre lo que se tiene, y permitirá la realización de los estudios pertinentes que para la conservación de estos bienes es necesaria.
“El inventario constituye un instrumento fundamental toda vez que permite conocer, cualitativa y cuantitativamente, los bienes que integran el patrimonio de la nación y posibilita el diseño y planificación de las políticas, normativas y acciones respectivas” (IPC, 1997)
Catalogación
Catalogar significa enumerar o enlistar, y constituye un instrumento de
agrupación o recopilación de datos sobre un bien, dentro de un carácter
homogéneo a partir de un listado especializado de los objetos a proteger que
contiene los datos sobre su caracterización, valor y reconocimiento.
“Es el instrumento administrativo y científico en el que se inscriben de forma individual los bienes objetos de tutela, los actos jurídicos que les afecten, el régimen de protección aplicable, las actuaciones a la que son sometidos y los resultados de los estudios realizados sobre ellos” (Diccionario razonado de bienes culturales, Jorge Benavides Solís, 1999)
Registro
Se refiere al conjunto de datos relacionados entre sí, que constituye el asiento o la
inscripción legal de los bienes que conforman el patrimonio cultural.
“El registro tiene por objeto la anotación e inscripción de actos que afecten a la identificación y localización de los bienes integrantes del patrimonio histórico." (Diccionario razonado de bienes culturales, Jorge Benavides Solís, 1999)
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